Sobre mí
Desde lo más profundo de ti hay una fuerza que se quiere expresar; es la energía portadora de tu salud y plenitud. En ese camino, esa fuerza se puede encontrar con algún obstáculo: recuerdos, tensiones, emociones, miedos, apegos, stress, accidentes, enfermedades, carencias nutricionales, creencias y conceptos… En contacto con el obstáculo, esta fuerza de salud lo pone de manifiesto, lo hace evidente, duele, aparece el sufrimiento. A esa manifestación la llamamos síntoma. Así, cada síntoma es un intento de manifestación de la salud y el cuerpo es el libro donde se escribe aquello que en este momento la está bloqueando.
Me considero osteópata, así que mi primera acción es atender el síntoma físico. Y lo haré con la conciencia de que detrás de tu lesión estructural hay algo más profundo que está tratando de ser visto, oído y sanado. Pero sé que no hay buen resultado en el físico si el nivel energético no es el suficiente para sostener las correcciones osteopáticas.
He aprendido que detrás de cada síntoma hay una creencia y un paisaje mental que están influyendo directamente en la química y la postura del cuerpo. Por ello no hay verdadera curación sin un cambio de pensamiento. Y que muchas de esas creencias y formas de pensar son aprendidas o heredadas de la red familiar, y que lo aprendido en la infancia de tus padres lo adquirieron ellos de los suyos y así hasta el origen de los tiempos, por lo que en el transgeneracional o el árbol genealógico está escrito el origen de gran parte de lo que nos sucede. Que también estamos hechos de información, más sutil que la energía. Que esa información es en su gran mayoría inconsciente y como tal está siempre activa y conforma nuestra forma de ver el mundo. Que se puede acceder a esa información y descodificar la que está causando problemas en el presente de la misma manera que quitamos un virus de un ordenador.
Por todo ello verás que te ofrezco un compendio de distintas técnicas. Todas ellas son herramientas para distintos aspectos o planos del ser humano.
Porque ayudar tiene que ver con dar libertad y herramientas, y porque me encantaría que conservaras los beneficios del tratamiento; el yoga y la meditación están llenos de prácticas y recursos para que avances en adelante por ti mismo. También sé que no todo sabemos curarlo, y eso nos mantiene humildes y curiosos a la vez; siempre en movimiento hacia un mayor conocimiento.